San Telmo cumple 117 años. Toda una historia persiguiendo sueños!
Lo cierto es que logró algo fundamental: contagiar a su gente, aprender a amar los colores, trabajar para crecer y soñar, siempre soñar con algo más. El principal triunfo es que este sentimiento se trasladó de generación en generación, de abuelos, padres, hijos, nietos.
La vida de San Telmo tiene muchos más golpes que alegrías y por eso se disfruta tanto este momento que nos toca vivir con el salto deportivo, la recuperación del sentido de pertenencia, la felicidad de ver a tantos chicos caminando por las calles luciendo la camiseta más linda de todas.
Un logro que tiene que estar acompañado del crecimiento institucional, el de las obras y construcciones para ser sustentables en el tiempo y alcanzar a generar el compromiso de todos para estar más cerca del Club, sentirse parte y trabajar para seguir logrando cosas que que generen felicidad y orgullo pensando siempre en aquellos que vendrán para que esta llama encendida sea realmente eterna.
En cada año, el reconocimiento, la valoración y recuerdo a todos aquellos que han pasado por San Telmo y dedicaron sus vidas persiguiendo sueños. Vamos Candombero!
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